Los Montes Virunga son una cadena de ocho volcanes
situada en la frontera entre Zaire, Ruanda y Uganda. En sus cumbres (muchas de
las cuales sobrepasan los 3.000 m de altitud) vive una reducida población de
gorilas de montaña, la única que queda en África.
Tras ofrecer sus servicios como
voluntaria al doctor Louis Leaky, para realizar un censo de gorilas de montaña, Dian Fossey
llega en 1966 al Congo, donde consigue los servicios de un rastreador,
Sembagare, que siempre la acompañará fielmente.
Comprenderá muy
pronto que las cosas no van a ser tan fáciles como esperaba, cuando, tras una
larga e infructuosa búsqueda, y tras conseguir finalmente contactar con los
gorilas fue expulsada del país cuando este se
encontraba en guerra civil, así que continuó su labor en Ruanda, donde estableció
su campamento a más de 3.000 metros sobre el nivel del mar.
Allí, para espantar a los nativos, se
hará pasar por bruja, tratando así de preservar la vida de los gorilas de los
supersticiosos habitantes.
Dos años más tarde llega al lugar un
reportero gráfico del National Geographic, Bob Campbell, ya que la sociedad a
la que pertenece financia el centro Karisoke y piensan que la difusión de las
noticias ayudarán a preservar el mundo de los gorilas.
Inmediatamente surge entre Bob y Dian
una historia de amor que queda interrumpida cuando la revista para la que
trabaja le envía a realizar otro reportaje en otro lugar y él decide
realizarlo.
Entre medias Dian debe lucha contra los
cazadores furtivos, quitando las trampas que tienden a los animales, y tratando
de evitar que los codiciosos zoológicos del mundo se los lleven tras pagar al
gobierno ruandés por ello.
La fundación le impone para seguir
financiando su tarea que enseñe a algunos estudiantes su trabajo, y, aunque en
un principio le parece bien, piensa que no se dedican con el suficiente empeño
y entusiasmo a su trabajo y también discute por ello.
No podrá evitar algunas matanzas, y,
algunas ventas. Pero su compromiso con los gorilas es tal que tras una de esas
matanzas de los pigmeos, y tras capturar a los culpables simula el ahorcamiento
de uno de ellos para asustarlos, quemando además sus cabañas.
Dian Fossey dirigió durante 20 años el Centro de
Investigación de Kasisoke, en los Montes Virunga, y alternó dicha tarea con
estancias en diversas universidades de todo el mundo para difundir los
resultados de su investigación, estos años supusieron la salvación de la
especie.
Fue asesinada en 1985, al parecer por los mismos
cazadores furtivos a los que ella se había enfrentado en muchas ocasiones.
Que tristeza su muerte, linda película, y que bellos los gorilas, me gustó, mucho saber de ellos gracias a todos
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